En la actualidad los gobiernos y gurúes se han visto
sorprendidos por un hecho: la sociedad, la economía demanda profesionales
cualificados en las industrias de la información. Se da la paradoja de
sociedades con un alto índice de paro en las que actualmente se quedan sin
cubrir puestos de trabajo de ingenieros de software, desarrolladores de
aplicaciones, documentalistas digitales,... esto ha sensibilizado a políticos e
instituciones a abordar el problema desde el punto de vista de la formación. Las
sociedades más avanzadas han visto que se trata de una nueva alfabetización, la
alfabetización digital, y que como tal hay que comenzar desde las primeras
etapas del desarrollo individual, al igual como sucede con otras habilidades
clave: la lectura, la escritura y las habilidades matemáticas.
Al llegar a este punto, un planteamiento, el más frecuente y el menos
reflexivo, ha consistido en favorecer el aprendizaje de forma progresiva.
Proponiendo a los niños tareas de programar, desde las más sencillas y más lúdicas a las más
complejas y aburridas, más aburridas a fuer de ser más reales o de ser
aplicadas a temas menos motivadores. Éste el planteamiento típico conductista.
Otros, algunos pocos en algunos países, pero más desde corporaciones que de
forma institucional, y frecuentemente de forma aislada, nos planteamos la
cuestión de otro modo: Las competencias de codificar son la parte más visible
de una forma de pensar que es válida no sólo en ese ámbito de la actividad
mental, la que sostiene el desarrollo y la creación de programas y de sistemas. Hay
una forma específica de pensar, de organizar ideas y representaciones, que es
terreno abonado y que favorece las competencias computacionales. Se trata de una forma de pensar propicia para el análisis y la relación de ideas, para la organización y la representación lógica. Esas habilidades se ven favorecidas con ciertas
actividades y con ciertos entornos de aprendizaje desde las primeras etapas. Se
trata del desarrollo de un pensamiento específico, de un pensamiento
computacional.
Paulo Blikstein
(2013) de la Universidad de Stanford, dice que si un historiador
tuviera que trazar una línea que uniese la obra de Jean Piaget sobre la
psicología del desarrollo a las tendencias actuales en la tecnología educativa,
la línea simplemente se llamaría "Papert". Seymour Papert
ha estado en el centro de tres revoluciones: el desarrollo del pensamiento en
la infancia, la inteligencia artificial y las tecnologías informáticas para la
educación. Quízá el que no haya tenido el impacto debido se deba a que se
anticipó.
La
visión de Papert se podría sintetizar diciendo que "los niños deben
programar la computadora en lugar de ser programados por ella" (children
should be programming the computer rather than being programmed by
it) (Papert, 1980 a través de Blikstein, 2013)
Ahora, en la fase actual del desarrollo de la tecnología y de las teorías del aprendizaje se podría decir "son los niños los que tienen que educar a los ordenadores no los ordenadores los que tienen que educar a los niños"
La creación de este blog, sus posts y en general las actividades y reflexiones que lo puedan rodear, está justificado por el papel que, en el nuevo contexto, tiene la formación desde las primeras etapas en habilidades que faciliten un aprendizaje orientado hacia la programación. O, como vamos a ver, se trata de una nueva alfabetización, de una alfabetización que permita a las personas en su vida real afrontar retos propios de la nueva sociedad y vaya más allá, permita a los individuos organizar su entorno, sus estrategias de desenvolvimiento, de resolución de problemas cotidianos y organizar su mundo de relaciones, en un contexto de comunicación más lógica y racional. Además de organizar estrategias para conseguir objetivos personales. En definitiva a conseguir una mayor calidad de vida y un mayor nivel de felicidad.
Por tanto, como idea-fuerza, es fundamental que, al igual que
sucede con la música, con la danza o con la práctica de deportes, se fomente
una práctica formativa del pensamiento computacional desde las primeras etapas de desarrollo. Y para ello, al igual que se pone en
contacto a los niños con un entorno musical o de práctica de danza o
deportiva,... se haga con un entorno de objetos que promuevan, que fomenten, a través de la observación y de la manipulación, aprendizajes adecuados para favorecer este pensamiento. No tenemos en muchos casos evidencias de que esos entornos y esas manipulaciones desarrollen las destrezas, habría que fomentar
investigaciones para tenerlas, pero sí sospechamos fuertemente que ocurre.
Tradicionalmente se ha hablado de aprendizajes o de destrezas concretas: Seriación, discriminación de objetos por propiedades, en las primeras etapas, y en las del pensamiento abstracto o para la resolución de problemas se ha hablado de la modularización, el análisis descendente, el análisis ascendente, la recursividad,...
Para lo primero hay multitud de recursos, juegos y actividades que los
educadores infantiles conocen bien.
Para ilustrarlo podemos recurrir a un caso concreto que he tenido oportunidad de conocer de primera mano.
Les sugiero que vean este vídeo con atención:
Este niño del vídeo es mi nieto. Cuando le
visito en su casa le llevo juguetes de Ikea (la empresa sueca debería
estar encantada conmigo y agradecida por el gasto y la publicidad que les hago.
Les sugiero que, como compensación, nos inviten a la familia a sus mundialmente
celebradas albóndigas). Algunos opinan que abrumo al bebé con este tipo de
trastos. Yo creo que sirven para que organice y secuencie objetos por colores,
tamaños, forma, etc. y para que perciba el plano y el espacio y sus
propiedades. Le gusta hacerlo pero sobre todo le gusta cuando le aplaudimos
porque lo hace bien.
En una ocasión le sorprendió a su padre, por eso conserva la grabación, que utilizase con tanta precisión la secuencia de colores alternativos para usar la cuchara. Les aseguro que no es un efecto buscado, que el niño no está "adiestrado", y conservo la voz de la madre para que se observe su sorpresa.
¿Qué es lo que había pasado
en su cabeza para que conservase tan estrictamente la secuencia de colores
alternativos al usar las cucharas? ¿Hay alguna relación entre los juegos que
había utilizado y el gusto o la preferencia por una secuencia basada en el
color? No tenemos ninguna evidencia que nos lleve a esa conclusión. Pero el que
utilizase el color para organizar la secuencia, de la misma forma que lo había
hecho en los juegos, nos induce a pensar que alguna relación había. Y que
lo que posiblemente hubiera sucedido es que había transferido la
idea (o la pre-idea, la asociación) desde el contexto inicial, los juegos, a
las cucharas. Es decir había manejado la
secuencia asociada al color con independencia de la situación.
Hay por tanto multitud de áreas del aprendizaje que conviene explorar e
investigar en esta nueva frontera. Y en la planificación de los curricula
tendrá que plantearse esta dicotomía: Enseñar a programar con dificultad progresiva (si se quiere incluso de forma
lúdica o con juegos) o favorecer este nuevo tipo de pensamiento. Obviamente no
hace falta decir que nuestra propuesta es la segunda, que además incluye a la
primera.
Pero volvamos al blog, su naturaleza y su
tema.
Tropezamos con varios problemas de
comienzo, delimitar el contenido y encontrar los términos y conceptos adecuados
para definirlo.
Pensamos inicialmente en utilizar la
expresión codificación y precodificación. La segunda extraída de la literatura
anglosajona, coding o code. En este sentido es utilizada en
los textos que publicitan este año como el año del código, o de la
codificación, o de la programación (Year of code). Así se dice:
A través de la codificación
(code) la gente puede descubrir el poder de la informática, cambiando su forma
de pensar acerca de su entorno y obtener el máximo provecho del mundo que le
rodea.
O
bien tal como se dice en el informe Computing our future Computer programmingand coding - Priorities, school curricula and initiatives across Europe:
La codificación (coding )es
cada vez más una competencia clave que tendrá que ser adquirida por todos los
jóvenes estudiantes y cada vez más por los trabajadores en una amplia gama de actividades
industriales y profesiones. La codificación es parte del razonamiento lógico y
representa una de las habilidades clave que forma parte de lo que ahora se
llaman "habilidades del siglo 21".
Como vemos es un dominio conceptual muy
próximo a lo que hemos visto y veremos que es el pensamiento computacional, al
menos se expresa con ese sentido que le hemos atribuido.
Por otro lado de igual forma que se habla
de prelectura, pre-escritura o precálculo para nombrar competencias que allanan
el camino a las destrezas clave y a las competencias instrumentales que
anuncian, cabe hablar de precodificación para designar las competencias que son
previas y necesarias en las fases anteriores del desarrollo para la
codificación. Como hemos dicho nos referimos por ejemplo a construcciones
mentales que permiten alojar caracteristicas de objetos de igual forma a como
lo hacen las variables con los valores: Son en este caso el color, la forma, el
tamaño,… O también operaciones con estos rasgos como son la seriación.
Evidentemente hay muchas más habilidades y más complejas en su análisis y en el
diseño de actividades y entornos para que este aprendizaje se produzca. Este
ámbito de la instrucción es lo que podría denominarse precodificación.
Podría llamarse igualmente preprogramación, pero
creemos que es más propio llamarle precodificación, pues codificación describe
con más precisión y más ajuste conceptual, la transferencia de acciones e
informaciones para que puedan ser interpretados por los ordenadores y otros
dispositivos de proceso, transporte y almacenamiento de la información.
Podría ser así, y sin duda sería correcto.
Sin embargo vimos que esto no correspondía con el propósito que es más amplio, que
es no solo preparar para la programación y para la codificación sino para
dotarse de claves de comprensión y de representación de los objetos de
conocimiento en general. Pensamos pues como más adecuada en la expresión
"pensamiento computacional" (computational thinking), que después desarrollaremos
Por otro lado hubiéramos podido elegir
igualmente el término alfabetización digital, reconociendo que impropiamente, en
español, tiene resonancias próximas al término "alfabetización
informática", al menos en su uso. Y éste hace hincapié en la informática de usuario al
considerare esta alfabetización como el conocimiento y la destreza para
manejarse en entornos de usuario. Así es frecuente entre la gente poco
ilustrada confundir al buen informático con el que maneja bien, es hábil con
los programas de usuario, las APPs, o al que se maneja con fluidez y rapidez en
los ambientes de menús, ventanas y opciones, o simplemente al que tiene
habilidad en los pulgares para manejar un smartphone, o con el índice para
moverse por un tablet.
No obstante podemos aceptar la definición de alfabetización digital ("computer literacy") como el conocimiento y la capacidad de utilizar las computadoras y la tecnología relacionada con ellas de manera eficiente, con una serie de habilidades que cubren los niveles de uso elemental de la programación y la resolución de problemas avanzada. (Washington, US Congress of Technology Assessment, OTA CIT-235 April 1984, page 234). Pero como hemos dicho ese mismo documento acepta que la alfabetización digital también se puede utilizar para describir el nivel de acomodo que un individuo tiene con el uso de programas de ordenador y otras aplicaciones que están asociados con las computadoras . La alfabetización digital por último se puede referir a la comprensión de cómo funcionan los ordenadores y a la facilidad de operar con ellos.
En el próximo post hablaremos más de "pensamiento
computacional" (computational
thinking) y de las iniciativas necesarias.
Referencias.-
Papert, S. (1980). Mindstorms: Children, computers, and powerful ideas. Basic Books,
Inc. http://www.arvindguptatoys.com/arvindgupta/mindstorms.pdf
Blikstein, (2013). Seymour Papert’s Legacy: Thinking About Learning, and Learning About
Thinking . https://tltl.stanford.edu/content/seymour-papert-s-legacy-thinking-about-learning-and-learning-about-thinking
Washington, US Congress of Technology Assessment, OTA
CIT-235 (April 1984). Computerized
Manufacturing Automation: Employment, Education and the Workplace, , page 234. http://ota-cdn.fas.org/reports/8408.pdf
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ResponderEliminarA mí me gusta mucho una cita de David Hume que me encontré en el Human Communication Research Centre de la Universidad de Edimburgo: "El espíritu de la era afecta a todas las artes y las mentes de los hombres ... y conduce a mejoras en todas las artes y las ciencias" (David Hume, 1752). En el lenguaje de nuestros tiempos, Hume nos habla de los paradigmas imperantes en una era —Edad Media, Renacimiento, Ilustración, Revolución Industrial, Revolución Científica— que afectan la manera de observar e interpretar el mundo y que conducen a maneras específicas de hacer y crear. Desde esta perspectiva, el pensamiento computacional sería el paradigma de nuestra; un paradigma todavía en construcción, en tanto que estamos apenas en los primeros años de la Revolución Digital.
ResponderEliminarPartiendo de este punto, coincido plenamente en que el pensamiento computacional va más allá de saber usar dispositivos digitales, de codificar, de programar y del pensamiento lógico matemático, si bien este último es su base y los primeros sus manifestaciones más comunes; pero hay otras: la teoría general de sistemas como una gran organizadora de nuestra observación del mundo y la sistematización como gran organizadora de nuestro hacer, la inteligencia artificial como una aproximación a la comprensión de la inteligencia, los modelos computacionales y las simulaciones como formas de experimentación en las ciencias y de demostración en las matemáticas, la ubicuidad de las tecnologías de información y comunicación y la creación de memes como "si no estás en la Web, no existes". Es probable que en el futuro cercano incorpore los conceptos de mente extendida y compartida y de inteligencia colectiva.
Aprovecho la ocasión para hacer referencia a una nota que escribí hace algunos meses en nuestro blog Desde el IGCAAV precisamente sobre este tema: http://investigacion.udgvirtual.udg.mx/blogs/archives/1834